Reseña ➳ Tres segundos para enamorarme de Cristina Otálora

→ Autor(a): Cristina Otálora
→ Traductor(a): -
→ Título original: Tres segundos para enamorarme
→ Género: Romance | Contemporáneo
→ Editorial: Cuarzo Rosa
→ GoodReads
→ Puntuación: ⭐⭐⭐⭐⭐

Sara y Marcos son amigos, a ratos.

El resto del tiempo son algo parecido a enemigos.

Ella es una chica correcta; él siempre ha hecho lo que le ha dado la gana sin importarle las consecuencias, una de las muchas razones que los enfrenta.

Cuando sus amigos, hartos de oírlos discutir, les dan un ultimátum, ambos se verán obligados a llevarse bien y resolver sus conflictos, pero lo que parece algo simple no les resultará tan sencillo.

¿Serán capaces de olvidar lo que ocurrió en el pasado y volver a ser amigos?

¿Podrán ignorar lo que surge cuando bajan la guardia y el amor los golpea?

∾  Opinión ∾

        Como siempre, os resumo mediante tropos literarios lo que os vais a encontrar en esta historia:

🦎 Amigos de la infancia ➜ cuando eran adolescentes hay un conflicto ➜ se "odian"

🦎 Proximidad forzada y momentos cómicos

🦎 Como subtrama de un personaje secundario vemos una relación tóxica

🦎 Los protagonistas tienen una química muy fuerte que se nota a través de las páginas

🦎 Medio triángulo amoroso (no exactamente porque Arturo y Sara tienen una especie de "relación" y luego tenemos a Sara y Marcos conteniéndose para no comerse

«—Me encanta verte sonreír, Sara.»

El libro empieza con un capítulo en el que vemos la primera interacción de Marcos y Sara, que tengo que decir que es conmovedora, no revelaré nada más. 20 años más tarde tenemos a Arturo, Claudia, Simón, Sara y Marcos, todos de Valencia, amigos desde la infancia celebrando el cumpleaños de Claudia. Ahí empezamos a ver un poco la dinámica de cada uno, pero como está desde el punto de vista de Sara nos va dando una idea de lo que piensa de cada uno de sus amigos.

Ella ha estado enamorada de Arturo desde siempre, pero éste en todo momento ha sentido una especie de repulsión al amor y a todas sus formas: el matrimonio, el término relación... Y, como os daréis cuenta, Sara teme confesarle sus sentimientos a Arturo por esto mismo. Se conforma con sexo esporádico y cuatro besos por parte de él.

«—¿Cómo voy a calmarme contigo encima? —inquirió, agobiada.»

De Sara conocemos, prácticamente, toda su vida: ha estudiado periodismo, su familia siempre ha sido idílica y su madre Lola tiene una papelería gracias al esfuerzo de su padre de cumplir su sueño. Un detalle que me ha gustado muchísimo es que Marcos la conoce perfectamente. En cualquier momento la comprendía (y le echaba cosas en cara porque Sara se ponía insoportable).

He juzgado bastante a Sara desde el principio hasta que me he dado cuenta de que soy como ella en varios aspectos y creo que en parte ha sido el motivo por el que he disfrutado tanto la historia.

«—Claudia tampoco debería operarse —añadió Sara—. Es guapísima. La mujer más sexi que conozco.

—Estoy de acuerdo en que no debería hacerlo, pero yo conozco a otra mujer igual de sexi o incluso más que ella.

—¿Quién? —quiso saber Sara, para ella pocas había más guapas que su amiga.

—Tú.

Ella se removió en la cama. No podía verlo, pero sus mejillas empezaron a encenderse.

—Eso lo dices para hacerme sentir mejor. No es comparable.

—Yo te follaría.

—¿Qué dices? Cállate —le pidió, avergonzada.

—Joder, ahora mismo si me dejaras. —Se rio.»

 De Claudia, una chica que siempre ha soñado y trabajado para llegar a ser modelo, fuerte e independiente, podemos ver que admite que tiene una debilidad por el amor. Esto le ha causado un historial un tanto curioso y malísimo con los hombres que ha escogido en su vida, nos cuenta que tiene un noviazgo con Flavio, un señor que se nos presenta como arisco, tóxico a más no poder, como se podía prever (porque te lo hueles desde el primer momento) aparte de que más tarde se revela, infiel; y que odia a sus amigos porque los considera vulgares. Claudia, que adora a sus amigos, se siente dolida por estas actitudes, pero por complacer a este idiota acepta cada una de las ridículas peticiones. Una de ellas en particular provocó una noche de drama.

Algo que he echado en falta es saber más de Simón, Marcos y Arturo. Sabemos bastantes cosas del trabajo de Claudia, su situación personal, etc. En cambio, de ellos tres, no sabemos apenas nada: se sabe por escenas en la historia que Arturo y Marcos trabajan (no de qué), que Arturo vive a diez minutos de sus padres y, en cambio, Marcos se vio forzado a alejarse e irse a vivir a Madrid; y de Simón solo nos cuentan que tiene coche (con el que van a Madrid) y que siendo el personaje que más odia el conflicto, acaba cantándole las cuarenta a Claudia y le hace abrir los ojos con la situación de su novio. Yo pensaba que estaba enamorado de ella, cosa que al final no acaba muy clara y espero que la autora nos dé un spin-off de Simón o algo.

Una parte en especial que me ha gustado mucho y que siento que me va a ayudar como escritora ha sido el cómo ir creando misterio con el conflicto que hizo que Sara empezara a cogerle manía a Marcos (que para mí ha sido un poco una tontería, pero a la vez entendía), ya que no te lo revelan desde el principio, sino que nos enteramos de que hubo un incidente en el pasado que hizo que cambiara por completo su relación de amistad. Al final la historia termina siendo adorable y hay una presencia en particular que me pareció muy tierna. Daré una pista: Motitas.

Hay varios momentos entre Sara y Marcos que son mis favoritos porque Sara baja la guardia un poco con él y descubre lo maravilloso que es Marcos en realidad: cuando viaja a Madrid sin que nadie se entere y se ve obligada por las circunstancias a pedirle ayuda, el momento del metro que marca un antes y un después (más tarde vemos que Sara admite que en esos TRES SEGUNDOS SE ENAMORÓ y yo estaba en Marte viendo cómo el título entraba en la narrativa) y que me tenía sudando de la tensión que había, y el último es en la fiesta ibicenca cuando Marcos le dice que no la besará si ella no lo hace y POR FIN liberaron toda la tensión acumulada.

«[...] sentía por ti, de que esto sí era amor, pero cuando lo he hecho, he comprendido que en realidad solo necesité tres segundos para enamorarme. —Se acercó a él con los ojos empañados y una gran sonrisa en los labios—. Aquel día en el metro, cuando me agarraste la mano, me enamoré de ti. Solo tres segundos: uno para intentar soltarme, dos para perderme en tus ojos y tres para darme cuenta de que entre nosotros ya nada sería igual.»

 

«—Anoche te dije que sería tuyo si tú me lo pedías.

—¿Mío? —le preguntó, confusa.

—Te haré todo lo que quieras —gruñó contra sus labios—. Solo tienes que decirlo.

—Quiero que me toques, Marcos, que me beses, que me folles, que me hagas el amor. Que hagas conmigo lo que quieras, pero que lo hagas ahora. Hazlo como te plazca.»

 La escena final en la que se descubre la verdad de todo por lo que Marcos tenía mala fama y se vio en la tesitura de tener que dejar todo atrás fue genial. Y el hecho de que Sara, que fue muy dura al principio con él por eso mismo, fuera quien acabó desvelando todo y gritando las verdades a los cuatro vientos le hace sumar puntos.

Marcos ha sido desde el principio mi favorito, no porque ya empiezas la historia sabiendo que ellos son los protagonistas, sino porque la vida le trató tan mal desde pequeñito y supo cómo salir a flote, que nada de eso afectara en su forma de ser y que en todo momento era auténtico... Mucho mejor que otros personajes masculinos.

Obviando algunos pequeños errores de puntuación y alguna que otra falta de ortografía que me ha hecho dejar de leer durante unos minutos («injirió» en vez de «ingirió»), tengo que admitir que la historia es preciosa y acabas cogiéndole cariño a los personajes. Sin duda, no puedo esperar a leer más de esta autora, que tiene una pluma muy bonita y ligera. Tengo que recalcar que en ningún momento las escenas más picantes me parecieron vulgares.